Más de 3.000 personas visitaron muestra del MIM en Tierra Amarilla
• Además, alumnos del Colegio Ambrosio O’Higgins de Vallenar presentaron su innovadora idea para ayudar al medio ambiente, con la que ganaron en la región de Atacama el concurso Los Creadores.
Tierra Amarilla recibió por primera vez una muestra itinerante del Museo Interactivo Mirador (MIM), que estuvo en esa comuna de la región de Atacama entre el 10 de octubre y el 2 de noviembre de 2019, recibiendo a más de 3.000 visitantes en el Gimnasio Techado de Tierra Amarilla.
Fueron 928 estudiantes, 132 profesores y casi 2.000 visitantes que corresponden a público general, quienes pudieron conocer en forma gratuita la exhibición interactiva “El Despertar de los Sentidos”, compuesta por 20 módulos que buscan desafiar a los visitantes con fenómenos de la ciencia del mundo que nos rodea mediante el asombro y la entretención.
La muestra busca poner a prueba su curiosidad mediante la estimulación de los sentidos, para comprender que mediante ellos nos conectamos con el mundo, pues nos permiten enriquecer nuestra percepción y proceso de aprendizaje.
La exhibición, que llegó a la ciudad gracias al apoyo de la Municipalidad de Tierra Amarilla y el Ministerio de Educación, cumplió además con ser un entretenido panorama educativo en que a través del juego, el asombro y la emoción conocieron sobre distintos fenómenos de la ciencia y del mundo que nos rodea.
Las muestras itinerantes del museo en regiones han sido visitadas por más de 2 millones de personas en más de 250 viajes a lo largo del país, desde que el MIM se inauguró en el año 2000.
Jóvenes talentos de regiones
Además, quienes visitaron la exposición conocieron el proyecto DIMA, ganador en la región de Atacama del concurso de innovación Los Creadores, de Fundación Kodea, y que fue elaborado por alumnos y alumnas del Colegio Ambrosio O’Higgins de Vallenar, quienes presentaron su proyecto en el Espacio de la Innovación de la exposición, los días 10, 11 y 12 de octubre.
El proyecto surge de la idea de aprovechar al máximo el recurso hídrico presente en las zonas agrícolas, para minimizar los costos y aumentar el nivel productivo, mediante un sistema automatizado de turbinas que aprovecha las aguas de ríos o canales, y que es capaz de generar y utilizar su propia energía, para regar y fertilizar de manera inteligente.